El Dr. Esteban Gándara, médico especialista en Clínica Médica y jefe del Departamento de Investigación del HPC, explica en este artículo cuáles son los síntomas de la Trombosis, qué puede causarla y cuáles son los tratamientos que se pueden llevar a cabo.
Si bien el cuerpo forma normalmente coágulos para evitar los sangrados, una Trombosis Venosa Profunda (TVP) o una Embolia de Pulmón (TEP) ocurren cuando se forma un coágulo de mayor tamaño que el normal y produce síntomas.
La Trombosis Venosa Profunda es un trombo que se forma generalmente en una vena profunda de la pierna o pelvis. En raras ocasiones afecta al brazo, las venas del hígado o del cerebro.El TEP es un trombo que migra desde una vena profunda de la extremidad inferior y compromete al pulmón. Generalmente no son causa de “infarto cerebral” o “cardíaco” La Trombosis Venosa Profunda (TVP) puede causar dolor e hinchazón a corto y largo plazo en la pierna. Se puede mover al pulmón y estos pueden causar la muerte. En raras ocasiones, la TVP es masiva y causa alteraciones arteriales que llevan al compromiso de la pierna. Los TEP pueden causar problemas respiratorios a corto y largo plazo. A veces pueden causar la muerte, si son muy grandes y no se busca ayuda médica en forma temprana u ocurren en pacientes con enfermedades previas debilitantes. Los signos y síntomas de la TVP son el resultado de la obstrucción del flujo venoso y de la inflamación. Los síntomas más comunes son: Hinchazón generalmente de una pierna, dolor en la pantorrilla, muslo interior o ingle, enrojecimiento y calor de la pierna afectada. En raras ocasiones (con hinchazón severa) la pierna puede estar fría con una coloración violeta / azulada. Los signos y síntomas del TEP más comunes son la falta de aire, dolor en puntada de costado o el síncope/shock. También sensación de desmayo o desmayo, toser sangre y dolor de espalda superior. Los factores de riesgo suelen agruparse en tres categorías la primera es la inmovilidad: estar en cama sin movilizarse por unos días o más, yeso en la pierna y no poder pararse ni caminar, viaje en avión por 6 hs. o más. La segunda categoría incluye las lesiones a los vasos sanguíneos: huesos rotos, accidentes, cirugía mayor o prolongada y por último la “Hipercoagulabilidad”, que es una tendencia a sobre coagular: condiciones médicas (como el Cáncer), hormonas (estrógeno, embarazo) y factores de riesgo genéticos / antecedentes familiares de PE / DVT. En situaciones de alto riesgo como cirugías mayores o inmovilidad prolongada, su médico recomendará anticoagulantes para prevenir una TVP o un TEP. La TVP y el TEP se tratan con anticoagulantes, que son drogas altamente efectivas para prevenir la progresión o la migración del trombo y han sido probadas en múltiples ensayos clínicos. Generalmente se puede comenzar con inyecciones seguido de pastillas, pastillas solas o inyecciones solas. Su médico le recomendará las opciones que considere mejores para su caso. Respecto a la duración del tratamiento dependerá de su riesgo de tener otro coágulo de sangre y su riesgo de sangrado, pero generalmente es de al menos 3 meses. El efecto secundario principal es el sangrado, que puede ser: menor (sangrado de la nariz / encías, moretones) o mayor (tos con sangre, sangre en vómitos orina o heces, cerebral). La TVP y el TEP son graves y pueden llevar a complicaciones potencialmente mortales. Estas pueden ser prevenidas en situaciones de alto riesgo. El tratamiento con anticoagulantes se debe tomar regularmente de la manera que fue indicado por su médico. Debe asistir a todos los controles y no tomar medicaciones (analgesicos y antibioticos) que no le hayan sido recetados por su médico debido al riesgo de interacciones graves. Informe a su médico si tiene nuevos síntomas de trombosis o de sangrado.También si continúa teniendo dificultad para respirar después de tres meses de recibir anticoagulación.