El Laboratorio Nacional Lawrence Livermore de California (EEUU) consiguió en diciembre del año pasado producir más energía de la que se usó en una reacción de fusión nuclear. En concreto, generó unos 2,4 megajulios (MJ) de energía con 2,1 MJ empleados con la fusión de un pequeño cilindro lleno de hidrógeno. Recientemente, unos investigadores, también estadounidenses, superaron este gran hito.
La segunda vez que lograron crear más energía de la utilizada fue el pasado 30 de julio, en este caso en el Laboratorio de la Instalación Nacional de Ignición de EEUU (NIF). Los científicos han llegado a una producción de más de 3,5 MJ, después de cinco intentos fallidos de replicar los resultados obtenidos a finales de 2022.
El proceso llevado a cabo recibe el nombre de ignición nuclear y es el punto en el que la fusión puede mantenerse por la propia energía que produce el sistema. Al lograrlo, el NIF ha reproducido la reacción que se da naturalmente en el Sol con el método ‘confinamiento inercial’, que se trata de mandar muchos rayos láser un pequeño cilindro llamado huhlraum y que dispone de hidrógeno en su interior.
La energía que se calcula que el NIF ha conseguido permitiría usar una plancha doméstica durante una hora o poner a hervir varios litros de agua, por lo que, pese a ser un gran resultado, todavía queda bastante trabajo que hacer en las investigaciones sobre fusión nuclear. Según los científicos, para conseguir alimentar los hogares y la industria, se necesitarían 100 láseres muy potentes que estuviesen disparando rayos varias veces al día.
Otra forma que se emplea para producir energía de fusión nuclear consiste en usar imanes gigantes que permitan mantener el combustible estable en un lugar mientras se calienta a temperaturas superiores a las del Sol, como es el caso de reactor de fusión ITER.