El desarrollo de esta herramienta de defensa contará con 110 millones de euros.
España será uno de los 5 países de la Unión Europea que desarrolle el escudo antimisil hipersónico. La necesidad de la UE de diseñar este escudo nace por la carrera de las grandes potencias de hacerse con el misil supersónico capaz de recorrer una distancia de 2.000 kilómetros a una velocidad de más de un kilómetro y medio por segundo, según Infobae.
La gran amenaza que presenta el misil se debe a la capacidad de transportar ojivas nucleares. Los primeros en desarrollar este armamento han sido China y Rusia, este último, ya lo ha probado en la guerra de Ucrania. Estados Unidos no ha sido menos, tras varios intentos infructuosos, ha conseguido su propio misil y planea tenerlo operativo en 2027.
La situación ha hecho que la UE comience el diseño de un escudo para defenderse de esta amenaza. La misión se llevará a cabo mediante la Organización Conjunta de Cooperación en Materia de Armamento (Occar).
La organización ya ha puesto en marcha el denominado programa Hydef (Hypersonic Defense Interceptor Study) en el que participan Bélgica, Alemania, Noruega, Polonia y España.
El objetivo de Hydef es a través de la investigación crear un interceptor europeo capaz de neutralizar las nuevas amenazas emergentes y las previstas para las próximas décadas.
La Occar ha firmado este lunes un contrato con la empresa española SMS y la alemana Diehl Defence para el desarrollo del antimisil hipersónico. De los 110 millones de los que se dota al programa, 100 provienen del Fondo Europeo de Defensa y los diez restantes por los países involucrados en Hydef.
Según el tiempo estimado por la Unión Europea, las empresas deberán presentar el concepto del misil con sus tecnologías definidas en 2026, paso necesario para la fabricación del primer prototipo, que debería estar listo hacia finales de esta década.
En el futuro, el sistema podrá detectar e interceptar misiles de crucero hipersónicos, así como vehículos de planeo hipersónicos altamente ágiles. Y siempre que sea posible, se desplegará sobre la base de los sistemas de mando y control existentes de la OTAN.