Por estos días todos tienen una opinión diferente sobre el impacto positivo o negativo de la inteligencia artificial. No hay claridad sobre el uso que la humanidad le dará y es este el reto más grande. De igual forma el futuro que se está forjando traerá varios retos, sobre todo en el mundo laboral, donde no sabemos qué sucederá cuando la mayoría de los trabajos sean desarrollados por la IA. Es por esta razón por la que es importante empezar desde ya a desarrollar el músculo de la resiliencia. Hay algunos estudios que muestran cómo las personas resilientes no son aquellas que esperan a que ocurran los desastres, sino que están entrenados y preparados para cuando el evento llegue.
La resiliencia está definida como la capacidad de adaptarse y sobrepasar situaciones difíciles, sobre todo aquellas de estrés. De acuerdo con los científicos Waugh y Koster, la resiliencia también es concebida como la recuperación graduar de estrés, es decir que una persona sufre un evento y es con el tiempo que se va recuperando.
De acuerdo con los psicológicos Masten y Reed, aunque la psicología positiva se enfoca en las emociones positivas, no deja de lado las negativas, sino que utiliza diferentes metodologías para ayudar a aliviarlas desde una perspectiva positiva, un ejemplo de ello es la resiliencia, entendida, como ya se dijo, como aquella habilidad de sobrepasar momentos difíciles. Cohrs por su parte, ha realizado estudios sobre la resiliencia como un generador de paz mental, llamada la psicología de la paz.
En un estudio realizado por Kimhi y Shamai, en 2004, con 741 personas que viven en la frontera entre Israel y el Líbano y que estuvieron expuestos a altos niveles de estrés por la guerra, se pudo evidenciar que cuando las personas desarrollan resiliencia son capaces de manejar altos niveles de estrés, así como sobrepasar situaciones de trauma, amenazadoras o violentas.
La ciencia ha descubierto que, si una persona no tiene altos niveles de resiliencia, debe iniciar un trabajo para su desarrollo, especialmente con todo lo que está ocurriendo sobre el tema de IA. Así que, a continuación, algunas actividades que ayudan al desarrollo de la misma.
Primero, entrenamiento positivo. Los científicos y la psicología positiva han sido muy enfáticos en entrenar a las personas a enfocarse en sus fortalezas y no en las debilidades, como una forma de poder superar retos difíciles.
Segundo, pequeñas dosis controladas de estrés. El estrés de por sí no es malo, sino la forma de manejo y gestión del mismo. Por esta razón, pequeñas dosis van creando el músculo suficiente para poder subir la resistencia.
Tercero, mindfulness. Las prácticas de mindfulness ayudan al manejo del estrés y a desarrollar la resiliencia, al tener una mente sana, equilibrada y clara, es más fácil poder tomar decisiones acertadas.
Cuarto, optimismo. Para esto es importante no enseñarle a nuestra mente y comportamientos a sentir impotencia, es decir a sentir que no se tiene el control o que no hay solución al problema. Los optimistas son aquellos que buscan soluciones.
Quinto, voluntad. Hasta a un optimista se le puede pasar una oportunidad si no tiene voluntad. La voluntad radica en la toma de decisión. Si una persona quiere ser feliz, requiere de voluntad para serlo, si una persona se queda sin trabajo por IA, necesita de voluntad para rehacer su vida. Todo en la vida requiere de voluntad y de práctica. A esto le llamados resiliencia.