A medida que el desarrollo de la Inteligencia Artificial avanza, también se progresa en otras áreas como, por ejemplo, los robots humanoides. Estos son robots con aspecto y capacidades humanas, es decir, tienen brazos, piernas, manos y demás aspectos para que puedan imitar los movimientos de las personas.
Sin duda una de las compañías más famosas en la producción de este tipo de robots es Tesla, la compañía de coches eléctricos propiedad de Elon Musk que ha diversificado su negocio y también están trabajando para crecer en el sector de la robótica. Sin embargo, acaban de dar con un contratiempo, por culpa de la intensificación de la guerra comercial que vive China con Estados Unidos desde la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca.
Las tensiones entre ambas potencias se han multiplicado en estos últimos meses, provocando que cada vez más empresas estadounidenses como ahora Apple, se marchen del país asiático a otras naciones para evitar los fuertes aranceles y demás golpes comerciales que se están produciendo.
Y como ha confirmado el propio Elon Musk durante la llamada de Tesla sobre las ganancias del primer trimestre, la producción del robot humanoide Optimus “se vio afectada” por un problema en la cadena de suministro en China. Esto es porque Tesla utiliza imanes de tierras raras procedentes de China para los actuadores de los brazos del robot y el gigante asiático ha comenzado a pedir una licencia de exportación para todos estos materiales de tierras raras.
“Tesla en su conjunto no necesita utilizar imanes permanentes, pero cuando algo está limitado por el volumen, como un brazo del robot, entonces quieres intentar que los motores sean lo más pequeños posible”, dijo Musk. Por ello ahora la compañía tiene que convencer a China de que estos materiales no se van a usar con fines militares, pero tienen un problema, estos imanes que usan para el robot también sirven para construir misiles y la estrecha relación entre el magnate y Trump genera desconfianza en China.
“China quiere algunas garantías de que no se utilizan con fines militares, lo que, obviamente, no es así”, dijo Musk. Debido a los aranceles, China ha pausado la exportación de estos materiales de tierras raras, aunque es cierto que si de verdad EEUU relaja estas tarifas, puede que China haga lo mismo.
Esto es algo que Tesla necesita “desesperadamente” ya que según los planes de Musk para antes de que acabe 2025, planean producir más de 5.000 robots humanoides Optimus, aunque el magante confía en que acumulen las piezas necesarias para poder producir entre 10.000 y 12.000 ejemplares.