La embajadora de Estados Unidos en Alemania, Amy Gutmann, en una rueda de prensa ha informado este miércoles que su país participará en un ejercicio militar, denominado “Air Defender 23”, junto a otros miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a celebrarse del 12 al 23 de junio.

El ejercicio incluirá entrenamiento operativo y táctico, principalmente en Alemania, pero también en República Checa, Estonia y Letonia, en el que participarán unos 220 aviones militares, y casi 10 000 soldados de 25 países miembros de la Alianza militar.

Se trata de la mayor maniobra militar de la historia de la OTAN que según la diplomática estadounidense tendrá un carácter puramente defensivo, pero también buscará enviar un mensaje, en particular a Rusia.

“Al surcar los cielos, juntos estamos exhibiendo la tecnología más avanzada, armamento poderoso, máquinas de combate y prevención, y, por tanto, de paz”, además de “nuestra herramienta más poderosa”, que es “la fuerza y el espíritu de nuestra alianza”, ha dicho Gutmann.

Por su parte, el general Michael Loh, director de la Guardia Nacional Aérea estadounidense, ha afirmado que este ejercicio pretende complementar la presencia permanente de EE.UU. en Europa y proporcionar formación a mayor escala de lo que suele hacerse en el continente.

Debido al ejercicio de mediados de junio, se determinaron espacios aéreos de zonas especiales en el sur, norte y este de Alemania. Se afirma que se cambiará la ruta de muchos vuelos civiles sobre el espacio aéreo europeo.

Rusia califica como “provocativas” las maniobras de la OTAN en Europa, lo que fortalece aún más la presencia de EE.UU. y sus aliados en el bloque militar cerca de las fronteras rusas; una expansión que Moscú ve como amenaza.

En este sentido, Moscú ha dejado claro que dará una respuesta contundente a cualquier acción que suponga un peligro para la integridad y la seguridad de las fronteras de la Federación Rusa.