Este 30 de mayo se abrirán las ofertas del concurso para la compraventa de crudo Oriente, convocado a última hora por parte de la Gerencia de Comercio Internacional de la estatal petrolera Petroecuador, y que busca colocar 3.600.000 barriles en diez cargamentos en todo el mes de junio.
Se trata de un concurso que arrastra una serie de cambios de reglas de juego y a través de las cuales Petroecuador, a costo de su propia ganancia, direcciona el proceso que incluiría un transporte más costoso (a través de Flopec) y sin premio.
Así, la también empresa pública Flopec -que junto a su socia Amazonas Tanker manejan solo Panamax y Aframax- ganaría porque su actividad sigue vigente, pero Petroecuador resultaría afectado, por castigos más fuertes a su precio del crudo y dejar de percibir un premio.
El polémico proceso tiene su origen el 24 de abril pasado, cuando a través de la Circular 00209 COM CPC 2024, Tomás Márquez, el anterior gerente de Comercio Internacional de Petroecuador, invitó a un concurso para la compraventa de crudo Oriente por un volumen de 15.120.000 barriles a ser entregados en el periodo de junio a noviembre.
En la licitación se indicaba que este crudo debía ser levantado en buques Suezmax (con capacidad para 1.080.000 barriles). Se lo haría en dos cargamentos cada mes hasta diciembre. También se había establecido que se debía presentar un premio ofertado. El primer cargamento estaba previsto a salir entre el 20 y 21 de junio y el segundo cargamento el 29 y 30 del mismo mes. Además, se esperaba que las ofertas fueran presentadas hasta el 13 de mayo.
En medio del proceso sale Tomás Márquez de la gerencia. Así, el 12 de mayo de 2024, un día antes de que se reciban las ofertas, a través de la Circular 232 COM CPC 2024, el nuevo gerente de Comercio Internacional, Sebastián Brito Mena, resuelve una postergación del concurso. Para que las ofertas sean entregadas hasta el 17 de mayo.
Seguidamente, el 14 de mayo se procede a la cancelación del mismo pues se indica que ha habido un cambio de reglas de juego por parte de Flopec: “es pertinente indicar que esta cancelación es ajena a las voluntades de la EP Petroecuador que fueron inicialm ente programadas; y, obedece a factores externos que recaen en la Resolución No. GGR-046-2024 emitida por EP Flopec el día 11 de mayo de 2024″.
La resolución firmada por Roberto Concha Rojas, nombrado como gerente(s) de Flopec, en esos mismos días, dejaba insubsistente otra resolución de marzo de 2024 en la que se permitía contratar Suezmax en caso de que Flopec no dispusiera de estos barcos, pero siempre pagando un 10% del valor del flete a Flopec. En la nueva resolución, se indica que solo Flopec nomina esos buques, y si Flopec no accede tendrán que transportar en Aframax o Panamax que son los buques que tiene esta empresa pública.
El 15 de mayo, en cambio, se invitó a un nuevo concurso, esta vez por 3.600.000 barriles a ser entregados en diez cargamentos entre el 14 de junio y el 1 de julio, es decir en menos de 14 días. El transporte se haría en barcos Panamax y Aframax (más pequeños que los Suezmax) y en esta convocatoria ya no hay el pedido de premio.
Sobre el tema, Julio Rivera, consultor petrolero, considera que Flopec es una carga para el Estado y su existencia le obliga a Petroecuador a hacer concursos con barcos más pequeños, pero esto termina perjudicando a Petroecuador en el precio del crudo. El gran problema, indica, es que si la empresa de transporte no usa los barcos, se generan pérdidas. El negocio para una empresa de transporte marítimo es tener en uso sus barcos, siempre viajando y esperando en los puertos el mínimo tiempo posible.
Comenta que al parecer por proteger a Flopec, se toman este tipo de decisiones.
Explica que si Petroecuador vende crudo a través de Suezmax, el valor del flete baja y en consecuencia el valor por barril mejora; pero al transportar en barcos Panamax y Aframax la tarifa de transporte sube y el precio del crudo tiene un mayor castigo. “El dinero que le llega a Flopec, se le quita a Petroecuador”, asegura.
Pero además sostiene que esta salida tardía para la venta de crudo le pasará factura a Petroecuador. Explica que este comportamiento se denomina distress en el comercio internacional. Entonces Petroecuador sale a vender “distresado” su crudo, cuando normalmente los mercados ya cerraron sus compras para junio, el 25 de mayo. El resultado que prevé es que el crudo ecuatoriano tendrá un fuerte castigo: “Nadie inteligente puede salir a vender crudo con poco tiempo, debería haber al menos 30 días en adelante”.
Además, explica que si en esta venta spot sale con un mal precio, se genera un mal precedente para futuras ventas. Adicionalmente, en este momento los volúmenes de crudo deben estar a tope en Balao, comenta.
De acuerdo con cálculos extraoficiales, la pérdida solo por premio para Petroecuador sería de US$ 37 millones.
El ministro de Energía, Roberto Luque, justifica estos cambios. Aseguró que como funcionarios, tanto Flopec y Petroecuador deben ver lo mejor para el Estado. “Esto puede ser que una empresa deje de ganar un poco para que la otra gane más, pero en el equilibrio debe estar cuánto gana Ecuador en este tema”, comentó.
Luque dijo que se está viendo cómo se maximizan los ingresos de Ecuador, independientemente de cómo se reparten estos ingresos entre las empresas estatales. Aseguró que “con Flopec puede ser que gane mucho más”.
