El riesgo de liquidez general seguirá siendo bajo en la mayoría de las empresas no financieras de grado especulativo, de servicios públicos e infraestructura en América Latina durante 2024-2025.
Sin embargo, si bien habrá una flexibilización de las condiciones crediticias generales en 2024, las altas tasas de interés y la volatilidad del acceso a los mercados seguirán ejerciendo presión sobre la calidad crediticia de las
empresas no financieras, especialmente las que se encuentren en el extremo inferior de la escala de calificación de grado especulativo.
Así lo detalle en un reporte enviado este lunes la agencia Moody’s Ratings, que afirma que las bajas de calificación seguirán superando las alzas en las empresas latinoamericanas en 2024, aunque a un ritmo más lento que en 2023.
“El riesgo de liquidez es más alto en Argentina y Perú, y entre los sectores, la agroindustria, las aerolíneas y las empresas de servicios públicos presentan algunos de los mayores riesgos de liquidez, en general” detalla la entidad.
Al entrar en el detalle por sector y país, Moody’s afirma que las condiciones crediticias mejorarán en algunas empresas no financieras de América Latina en 2024, tras un 2023 ajustado en un contexto de crecimiento económico moderado.
Así, tanto las tasas de interés como la inflación están disminuyendo en las principales economías de la región, pero las tasas de interés aún elevadas seguirán afectando la asequibilidad de la deuda. No obstante, la desaceleración del crecimiento en China podría reducir el crecimiento de la demanda de commodities.
“Las elecciones presidenciales en México, Uruguay, Panamá y Estados Unidos (EE. UU.) también determinarán el entorno político. El crecimiento económico en América Latina será desigual en 2024 y se mantendrá por debajo de la tendencia en toda la región”, asegura.
Por otra parte, las empresas no financieras de grado especulativo de América Latina tenían aproximadamente US$ 384.000 millones en deuda total circulante a diciembre de 2023. Las empresas calificadas en Ba, la categoría más alta de grado especulativo, tienen mejor acceso al capital que sus pares con calificaciones más bajas y representan poco menos de dos tercios de los vencimientos anuales.
Sin embargo, las empresas con calidad crediticia más débil tienen vencimientos anuales de alrededor de US$ 5.000 millones y asumen un mayor riesgo de refinanciamiento, con una mayor probabilidad de incumplimiento.
Por otra parte, a diciembre de 2023, las empresas no financieras de grado especulativo de América Latina tenían una deuda de US$ 81.300 millones con vencimiento en los próximos 24 meses y alrededor del 29% de esta cifra estaba en manos de empresas con alto riesgo de liquidez frente al 22% de las empresas con riesgo medio y el 49% con riesgo bajo.
Dentro de la categoría de alto riesgo, el sector de telecomunicaciones y medios de comunicación tuvo la mayor concentración de deuda circulante del 58% del total de US$ 4.800 millones en el sector, en comparación con el 43% del total en el sector de petróleo y gas, el 24% del total en el sector de agroindustria y el 34% del total en las empresas de servicios públicos.
Mientras que poco más de la mitad de la deuda futura del sector de petróleo y gas es con la petrolera estatal mexicana Petróleos Mexicanos (Pemex, B3 negativa).
“La mayoría de las empresas de servicios públicos de América Latina tienen un riesgo de liquidez bajo a medio, salvo en Argentina, donde se encuentran cuatro de las seis empresas de servicios públicos de alto riesgo de la región”, finalizó la entidad.