Presidente de EE.UU., Joe Biden, en Washington D.C., 14 de marzo de 2022. (Foto: Getty Images)
Rusia impuso sanciones personales a una serie de políticos y altos funcionarios de EE.UU., incluidos presidente Joe Biden y secretario de Estado Antony Blinken.
“Este paso, tomado a modo de respuesta, es una consecuencia inevitable de la política extremadamente rusófoba adoptada por la actual Administración de EE.UU., que, en un intento desesperado por preservar la hegemonía estadounidense, rechazando toda decencia hizo una apuesta por la contención frontal de Rusia”, ha denunciado este martes la Cartera rusa.
En su comunicado, ha señalado que la decisión de Moscú es una respuesta a una serie de sanciones sin precedentes de Washington, que prohíben, entre otras cosas, la entrada de altos funcionarios rusos al país norteamericano, a la vez que ha prometido una ampliación de la lista de las personas sancionadas en un futuro próximo.
Con todo, Rusia no descarta mantener contactos oficiales con EE.UU. si ello corresponde a los intereses nacionales de Moscú y, en caso de necesidad, resolverá los problemas que surjan del estatus de los individuos incluidos en la “lista negra”, se lee en el texto.
Rusia promete dar una respuesta “fuerte” y “dolorosa” a las sanciones de EE.UU., anunciadas tras el reconocimiento de la independencia de Lugansk y Dontesk.
Según el comunicado, la lista incluye a trece funcionarios estadounidenses, entre ellos Biden, Blinken, el secretario de Defensa, Lloyd Austin, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, entre otros funcionarios.
En este contexto, el Gobierno ruso, presidido por Vladimir Putin, anunció el 7 de marzo una lista de Estados y territorios extranjeros que cometen acciones hostiles contra el país euroasiático, sus funcionarios, empresas y ciudadanos, en la que se encuentra EE.UU. junto con miembros de la Unión Europea (UE).
Esto en el medio de la escalada de tensiones entre Rusia y el Occidente, encabezado por Washington, disparada después del inicio de la operación rusa en Ucrania.
Ante tal situación, EE.UU., el bloque comunitario y otros Estados y organizaciones occidentales, aplicaron varias rondas de sanciones financieras y comerciales contra funcionarios rusos, incluidos Putin y el canciller Serguéi Lavrov. No obstante, las autoridades rusas han asegurado una y otra vez que tales medidas antirrusas no pueden aislar al país euroasiático.