En la provincia de Jiangxi, en el sureste del país, las viviendas de casi 500.000 residentes sufrieron daños.
Las fuertes inundaciones que afectan al sur de China estos días han provocado la evacuación de decenas de miles de personas, arrastrando casas, autos y cultivos en las zonas más castigadas, mientras las previsiones meteorológicas contemplan más lluvias para los próximos días.
En la provincia de Jiangxi, en el sureste del país, alrededor de 485.000 residentes se vieron obligados a abandonar sus hogares, que sufrieron daños. Entre el pasado sábado y este lunes, las lluvias torrenciales provocaron inundaciones en 55 distritos de la provincia y afectaron a 43.300 hectáreas de cultivos, elevando las pérdidas económicas por encima de 70 millones de dólares.
Casi la misma cantidad de personas se vio afectada en la vecina provincia de Cantón, sobre todo en las ciudades de Shaoguan, Heyuan y Meizhou. Ante la subida de las aguas y la amenaza de desprendimientos, se suspendieron las clases, el trabajo en las oficinas y el transporte público.
En la provincia costeña de Zhejiang, situada ligeramente más al norte, los equipos de rescate acudieron a las localidades inundadas en lanchas inflables para evacuar a los residentes que habían quedado atrapados en sus casas.
Entre las provincias más afectadas están también las de Guizhou y Hunan. En esta última, las fuertes precipitaciones provocaron el derrumbe de al menos 94 viviendas y destruyeron más de 21.607 hectáreas de cultivos entre el pasado viernes y este marte