Hace tres décadas, después de encontrársele responsable de fraude, ‘Cheverengue’ fugó del país y pasó a ser el ‘más buscado’ por la justicia peruana
Carlos Manrique Carreño, creador del Centro Latinoamericano de Asesoramiento Empresarial, mejor conocido por sus siglas CLAE, falleció la madrugada hoy en el Hospital Ramón Castilla II de Essalud, en el Cercado de Lima, informó su entorno familiar.
Sabino Manrique, hermano del también conocido como ‘Cheverengue’, confirmó el deceso a RPP Noticias, tras detallar que este se encontraba internado desde el pasado lunes 9 de julio, por unas severas complicaciones de salud. Lo avanzado de su edad —estaba camino a cumplir 90 años— dificultó su recuperación.
Las autoridades peruanas encontraron responsable a Manrique Carreño de fraude y otros delitos vinculantes. Se calcula que desapareció el ahorro de más de 250 mil personas desde los años 80 hasta principios de los 90 y, tras esto, se le acuñó ser el autor de la mayor estafa financiera en la historia del Perú.
Liderazgo y esquema piramidal
Sobre Carlos Manrique se sabe que nació en 1936 en la región Cusco. En los inicios de su vida laboral se desempeñó como profesor de matemáticas. Egresó de la entonces Escuela Normal de Varones (ahora llamada Universidad Enrique Guzmán y Valle o La Cantuta). Tenía ascendencia sobre los demás y se convirtió rápidamente en asambleísta universitario.
Sus habilidades de liderazgo y convencimiento las direccionó a la formación del llamado CLAE, que en los inicios brindó solo asesorías en administración de empresas. Sin embargo, al ver que el rubro era poco rentable, Manrique le dio un giro al negocio y lo puso a andar bajo un esquema piramidal.
Invertían a ojos cerrados
A diferencia de los banqueros tradicionales, ‘Cheverengue’ se ganaba la confianza de sus clientes —en ese entonces llamado claeístas— atentiéndolos personalmente. Principalmente captaba a empleados del sector público ya jubilados y exoficiales de las Fuerzas Armadas. Estas personas adultas mayores valoraban tener ese trato directo y casi a ojos cerrados entregaban todos los ahorros de su vida, no sin antes hacer cuentas de los atractivos intereses que les prometía ganar.
Informes periodísticos de esos años, cuando CLAE estaba en su apogeo, refieren que la financiera de Manrique prometía a los usuarios ganancias mensuales de hasta 13 % y anuales de 100% de lo invertido.
No hay documentos que confirmen la cantidad de dinero que movió CLAE durante los varios años que operó en el Perú, pero en la prensa de aquella época se habló de que fue un total de casi 650 millones de dólares, de los que no se rindió cuenta al Estado peruano.
Hasta el final de sus días, ‘Cheverengue’ negó tajantemente que haya estafado a sus ahorritas y, por ende, que CLAE haya sido la mayor estafa financiera de la historia peruana, como difundieron medios televisivos, escritos y radiales.
Fuente: Infobae