El ciclista suizo Stefan Küng sufrió un impactante accidente en la prueba contrarreloj del Campeonato de Europa en la disciplina contrarreloj y llegó a meta con el rostro y el maillot completamente ensangrentados, así como un corte en la cabeza y el casco partido por la mitad.
El doble campeón de Europa, al que el casco le salvó la vida, intentó acortar lo máximo en una curva. Sin embargo, el cansancio le jugó una mala pasada y perdió el control de su bicicleta, lo que provocó que empezase a inclinarse y terminase enganchándose con una de las patas de las vallas que delimitan el recorrido.
Este tipo de vallas están prohibidas en competiciones internacionales debido a que pueden provocar caídas como esta y las únicas que se permiten son las que tienen las patas hacia dentro.
La caída le provocó a Küng un corte en la cabeza a pesar del casco, que terminó partido en dos mitadas. La gran cantidad de sangre que brotaba de la herida manchó el rostro y el maillot del ciclista, que pudo terminar la prueba.
Este infortunio, sin embargo, privó al suizo de pelear por el podio, cuando en los dos primeros puntos cronometrados de esta prueba había cruzado en tercera posición, y solo pudo terminar en undécima posición en la clasificación final a un minuto y 29 segundos de Joshua Tarling, que se proclamó Campeón de Europa con 19 años.
