El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha aprobado un préstamo de US$ 600 millones (556 millones de euros) para fortalecer la sostenibilidad de la gestión fiscal en apoyo al programa de recuperación económica de Perú.
El Programa de Apoyo a la Recuperación Fiscal y Económica de Perú II, aprobado por el Directorio Ejecutivo del BID, ayuda al gobierno peruano en el impulso de medidas para salvaguardar el marco fiscal. Asimismo, se enfoca en incrementar la recaudación tributaria, tanto a nivel nacional como municipal, aumentar la inversión pública, manteniendo niveles de gasto que permitan la recuperación económica y fiscal, y promover la efectividad del gasto público.
Esta es la segunda y última operación de una serie programática, bajo la modalidad de Préstamo Programático de Apoyo a Reformas de Política (PBP).
“Esta segunda operación permitirá profundizar la implementación de medidas estructurales para consolidar el fortalecimiento de la sostenibilidad de la gestión fiscal y así contribuir a la recuperación económica del país”, ha expresado Axel Radics, especialista líder de la División de Gestión Fiscal del BID.
El programa beneficiará a la ciudadanía peruana en su conjunto, la cual podrá acceder a más obras y servicios públicos, gracias a que el gobierno contará con más recursos tributarios, y podrá hacer un gasto público más eficiente y equitativo. Las empresas también se beneficiarán gracias a la transparencia tributaria, que promueve la inversión privada, y las mujeres tendrán más oportunidades de contratar con el Estado.
El programa se implementará a través de cuatro componentes. El primero busca mantener un contexto macroeconómico apropiado. El segundo componente se enfoca en salvaguardar el marco fiscal, apoyando la mejora de las proyecciones macrofiscales del gobierno, para que incluya el análisis de los riesgos macroeconómicos y fiscales de desastres naturales vinculados al cambio climático, con énfasis en el fenómeno de El Niño. También se apoya el fortalecimiento institucional del Consejo Fiscal de Perú.
El tercer componente apunta al fortalecimiento de la política y la gestión tributaria, apoyando los esfuerzos del gobierno para identificar mejor a los contribuyentes del impuesto predial y aumentando los intercambios de información con otros países para incrementar los ingresos fiscales por hallazgos de auditoría y cumplimiento voluntario.
Por último, el programa busca mejorar la gestión del gasto público, promoviendo mayor eficiencia en la ejecución de la inversión pública y las compras públicas, un nuevo modelo de contabilidad de costes para utilizar los recursos públicos de manera más eficiente, y una mejor asignación del presupuesto mediante medidas para una mayor calidad del gasto.
Este préstamo a Perú tiene un plazo de amortización de 20 años, un periodo de gracia de cinco años y medio y una tasa de interés basada en SOFR (Secured Overnight Financing Rate).