Por la coalición de derecha Chile Vamos van Joaquín Lavín, Mario Desbordes, Ignacio Briones, y Sebastián Síchel. Mientras que en el frente de izquierda pugnan Daniel Jadue y Gabriel Boric
Cuatro precandidatos de derecha y dos de izquierda se miden el domingo en las primarias presidenciales de Chile, una votación que marca el inicio de una carrera para suceder al mandatario conservador Sebastián Piñera, en medio del proceso constituyente que vive el país
Queda por saber si antes de la primera vuelta presidencial, el 21 de noviembre, habrá una candidatura de Concertación, aquella exitosa coalición de partidos políticos de izquierda, centroizquierda y centro, que gobernó Chile desde el fin de la dictadura en 1990 hasta convertirse en 2010 en un referente opositor del primer gobierno de Piñera.
En medio de una crisis de deslegitimidad institucional, el domingo vuelve a ser clave el nivel de participación electoral, que en las elecciones de junio para elegir gobernadores alcanzó solo 19,6% de los 13 millones de convocados.
Los precandidatos de la coalición de derecha Chile Vamos son Joaquín Lavín, de la ultraderechista Unión Demócrata Independiente (UDI); Mario Desbordes, del conservador Renovación Nacional (RN); Ignacio Briones, del liberal Evópoli, y Sebastián Síchel como independiente.
En el frente de izquierda, la pugna de la coalición opositora Apruebo Dignidad, enfrenta a Daniel Jadue, del Partido Comunista (PC), ante Gabriel Boric, del Frente Amplio, uno de los referentes en las movilizaciones estudiantiles de 2011.
Las primarias ocurren en un clima de ebullición política tras la instalación el 4 de julio de la Convención Constitcional, encargada de redactar la nueva Carta Magna que sustituirá la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y que puso en jaque la política tradicional con la irrupción de independientes y grupos ciudadanos.
Desde que el 18 de octubre de 2019 la ciudadanía de Chile tomara las calles para exigir mayor bienestar social y equidad, ni encuestas ni estudios han conseguido predecir los resultados en las urnas, y estas primarias no son la excepción.
“La elección es muy incierta, como todo lo que está ocurriendo hoy día en Chile. Existe en cada uno de estos dos bloques un candidato que aparece como favorito pero con un candidato desafiante”, explica a la AFP el académico de la Universidad de Santiago de Chile, Marcelo Mella.
El lastre de Piñera
Los chilenos están sumidos en una dinámica electoral que comenzó el 25 de octubre de 2020 con el plebiscito que avaló el cambio constitucional. Siguió con los comicios en mayo, cuando eligieron alcaldes, concejales, gobernadores regionales, y 155 constituyentes, y ahora definen los candidatos a ocupar el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.
De los precandidatos de derecha, todos han sido ministros de Piñera en su primer (2010-2014) o actual mandato, y arrastran la sombra de un presidente “que tiene bajos niveles de aprobación y altos niveles de rechazo de la opinión pública”, advierte Mella.
La académica del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, Mireya Dávila, afirma que la derecha “tiene más debilidades que fortalezas”, incluso dirigentes de su coalición acusan a Piñera de dirigir un mal gobierno.
A eso se suma “la derrota del ‘rechazo’ (a la nueva Constitución que defendió la derecha en el plebiscito), la baja representación en la Convención Constitucional y en las elecciones de gobernadores”, agrega Dávila.
Salvo sorpresa, la victoria en la derecha se decidirá entre Lavín, que perdió dos elecciones presidenciales y es alcalde de Las Condes, uno de los barrios más ricos de Chile, y Síchel, que llega con apoyos externos a los partidos tradicionales.
Con la ola progresista
Hasta la semana pasada, el comunista Daniel Jadue, alcalde de Recoleta, en el norte de la capital chilena, despuntaba en los sondeos en su camino a la presidencia, pero Gabriel Boric, diputado de 35 años del Frente Amplio, ha sumado apoyos a medida que se multiplicaban los debates públicos, en los que ha mostrado un tono conciliador en un momento de alta sensibilidad ideológica.
Desde el Partido Comunista acusan a Boric de aprovecharse del sentimiento anticomunista en parte de la sociedad.
“El Frente Amplio no creo que sea anticomunista, pero usa de alguna manera este anticomunismo que existe y eso es aprovechar el anticomunismo que lanza la derecha y otros sectores”, dijo el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, al diario La Tercera.
Quedaron fuera de esta primaria de centroizquierda la Democracia Cristiana, el Partido Socialista y el Partido Por la Democracia, socios en la Concertación, que perdieron su histórico apoyo entre el electorado progresista tras el cambio social que vive Chile desde 2019.
“Hay una orientación del proceso político en Chile en orden a generar una nueva oferta y nuevos liderazgos, por lo que estas alternativas a la derecha e izquierda podrían dar una sorpresa el próximo domingo”, dijo Mella.