El Comité de Descolonización de Naciones Unidas volvió a considerar a la cuestión sobre las Islas Malvinas como “un caso de colonización” que debe ser resuelto a través del diálogo. “¿Hay estados habilitados a incumplir con la carta de la ONU?”, preguntó el canciller argentino Santiago Cafiero.
Argentina volvió a reivindicar su soberanía sobre las Islas Malvinas ante el Comité de Descolonización de Naciones Unidas y reclamó que el Reino Unido cumpla las reiteradas resoluciones de Naciones Unidas para entablar negociaciones entre las partes para resolver la cuestión de las islas ubicadas en el Atlántico Sur.
El Gobierno argentino envió una amplia representación para defender la soberanía, a 40 años del conflicto armado que en 1982 enfrentó al país sudamericano con el Reino Unido.
La delegación estuvo encabezada por el propio canciller Santiago Cafiero pero también incluyó a Guillermo Carmona, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur; Gustavo Melella, gobernador de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, Andrés Dachary, secretario de Malvinas, Antártida, Islas del Atlántico Sur y Asuntos Internacionales de la provincia y un grupo de congresistas argentinos de varios partidos.
“En Argentina decimos que Malvinas nos une. Hoy tengo el honor de estar acompañado de una numerosa delegación”, destacó Cafiero durante su intervención.
El canciller remarcó ante el Comité que “las victorias militares no otorgan derechos“, por lo que el resultado del conflicto armado de 1982 no refuerza la postura británica. En ese sentido, apuntó que “al momento de las hostilidades la Argentina estaba siendo gobernada por una Junta Militar ilegal e ilegítima que se apartó de la postura de la resolución pacífica”, sostenida por Argentina desde la ocupación británica en 1833.
El canciller utilizó su intervención para señalar el incumplimiento del Reino Unido a las resoluciones de Naciones Unidas que históricamente lo conminan a sentarse a negociar con Argentina sobre la soberanía de las islas.
“Me pregunto si es que hay democracias que valen más que otras. ¿Hay estados habilitados a incumplir con la carta de la ONU y no leímos la letra chica?”, preguntó Cafiero.
Cafiero también afirmó que la postura del Reino Unido “se contradice” a lo largo de los años y acusó a los británicos de mantener la militarización de la zona “como si el conflicto hubiera sido ayer”.
Además de la intervención de los países que integran el Comité de Descolonización, la mayoría de los cuales respaldó el pedido argentino para que haya un diálogo directo de las partes, la sesión incluyó la participación de dos testimonios por cada parte.
A favor de la soberanía argentina de las islas hablaron dos mujeres descendientes de las primeras personas nacidas en las islas. Clara Vernet, descendiente de Matilde ‘Malvina’ Vernet, la primera mujer nacida en la isla e hija de Luis Vernet, el primer gobernador argentino en las islas. Clara Vernet destacó las memorias que heredó de su familia de la época en que el territorio era habitado por argentinos, antes de la ocupación británica de 1833.
También aportó su testimonio familiar Mercedes Moyano Walker, también descendiente de aquella primera población argentina en las islas.
Por el lado de los ocupantes británicos de las islas, expusieron dos congresistas del legislativo: Leona Vidal Roberts, de ascendencia chilena pero habitante de las islas desde su niñez, y Gavin Short.
Como sucede tradicionalmente en el Comité de Descolonización, la delegación oficial de Chile presentó la resolución que invita a las partes a resolver el conflicto a través de una negociación bilateral.
La resolución reconoce a la cuestión Malvinas como un caso de colonialismo y reafirma que “el mantenimiento de situaciones coloniales en pleno siglo XXI es un anacronismo que se debe terminar”.