En el sur de México se apoya a los adultos migrantes que vienen con sus hijos menores de edad, pues tienen más riesgos en su camino en busca del sueño americano.
En el sur de México, específicamente en el estado de Chiapas, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en alianza con el Gobierno y otras organizaciones, han brindado atención a unos 4 mil niños migrantes en un conjunto con proyectos integrales.
Trabajan principalmente con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) en proyectos que van desde aseo personal hasta atención a la salud.
Los migrantes que vienen con sus hijos saben que tienen más riesgos en su intento por llegar a los Estados Unidos, aunque reconocen que han recibido ayuda para hacer este viaje menos pesado.
Dentro de la ayuda que da la Unicef, el Gobierno y otras instituciones, es la de no separar a los menores de sus padres, pero comprometen a los papás a no exponer a riesgos mayores a los niños durante su trayecto.
En los últimos años, a la frontera sur de México llegan miles de migrantes acompañados de sus hijos, quienes lamentablemente también pasan carencias intentando buscar una mejor calidad de vida.
Es por ello que los Gobiernos federal y estatal han unido esfuerzos con la Unicef y otras organizaciones, para ayudar y brindar una atención integral a los migrantes que son menores de edad