La empresa privada china iSpace anunció este domingo que llevó a cabo otra prueba de despegue y aterrizaje vertical de la primera etapa de su cohete reutilizable Hyperbola-2, conocido con el nombre clave de SQX-2Y. El ensayo se realizó en el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan, en el desierto del Gobi.
La etapa de verificación reutilizable estaba equipada con el motor de empuje variable de metano y oxígeno líquido Focus-1. De acuerdo con iSpace, el aparato se elevó a una altura 343,12 metros durante 63,15 segundos antes de realizar un descenso controlado a una velocidad de 1,1 metros por segundos.
Asimismo, detalló que el dispositivo aterrizó con una precisión de 0,295 metros en un sitio ubicado a 50 metros del lugar de donde despegó inicialmente. “La misión de prueba de vuelo fue un completo éxito”, indicó iSpace, recalcando que se obtuvieron “datos de vuelo de cada sistema”. También señaló que este ensayo proporcionó información técnica para el diseño del “vehículo de lanzamiento reutilizable Hyperbola-3”, conocido con el nombre de SQX-3, en el que actualmente están trabajando los especialistas de la compañía.
Perspectivas para futuras pruebas
Algunos expertos, citados por el diario Beijing News, dijeron que este segundo vuelo no era una repetición, puesto que, en términos de perfil de vuelo, el cohete voló más alto que durante la primera prueba, que tuvo lugar el pasado noviembre. Además, precisaron que el Hyperbola-2 añadió 50 metros de maniobrabilidad lateral, lo que sienta la bases para una posible recuperación en el mar, así como otras operaciones de mayor dificultad.
Por su parte, el ingeniero en jefe del Hyperbola-2, Ji Haibo, explicó a un medio estatal que para poder reutilizar los cohetes es necesario realizar inspecciones y procedimientos de prueba después de cada recuperación. A su vez, enfatizó que se requiere alrededor de 10 días para completar un “examen físico” pertinente para que el cohete esté listo para volar nuevamente.
“En el futuro, esperamos lograr pruebas ‘in situ’ del sitio de lanzamiento”, afirmó Ji, quien agregó que, si el proyectil se encontraba “en buenas condiciones”, podría “repostar combustible al tercer día y realizar nuevamente la misión de vuelo”. Por último, anunció que se tiene previsto para el próximo año que el cohete se someta a una prueba de vuelo para recuperarlo en el mar.
El Hyperbola-2 será un cohete reutilizable de dos etapas propulsado por motores de metano y oxígeno líquido. Según el vicepresidente de tecnología de iSpace, Dong Yanmin, el aparato tiene una longitud de 28 metros, con un peso de despegue de 90 toneladas. Dong dijo que el Hyperbola-2 podrá transportar 1,9 toneladas de carga útil a la órbita terrestre baja.
Hasta el momento, el Falcon 9 de SpaceX es el único cohete reutilizable de clase orbital a nivel mundial. La primera etapa del Falcon 9 tiene la capacidad de aterrizar de manera vertical, además de poder reutilizarse para otras misiones.