La vice primera ministra de Bélgica, Petra de Sutter.
A medida que aumenta la cifra de las víctimas de bombardeos indiscriminados israelíes en Gaza, crecen las voces que exigen castigar a Israel por el genocidio.
La vice primera ministra de Bélgica, Petra de Sutter, se sumó el martes a los llamados a lo largo y ancho del planeta, solicitando “actuar contra la amenaza de genocidio” por parte del régimen de Israel en la asediada Franja de Gaza.
“Bélgica no puede quedarse impasible y observar el inmenso sufrimiento humano en Gaza. Debemos actuar contra la amenaza de genocidio”, subrayó la ‘número dos’ del Gobierno belga en su cuenta oficial de la red X.
Hizo hincapié en la necesidad de que su Bélgica, “siguiendo el ejemplo de Sudáfrica”, presente una demanda oficial contra Israel en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) —órgano judicial de las Naciones Unidas— en el marco de la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948. Aseguró que propondría el tema “dentro del Gobierno”.
Desde el Consejo de Seguridad de la ONU, alzan la voz contra el genocidio israelí en la Franja de Gaza, piden levantar el bloqueo y una tregua humanitaria.
Tras casi tres meses de bombardeos incesantes israelíes contra el enclave costero que han dejado al menos 30 000 muertos y desaparecidos, y un asedio total que provocó la peor catástrofe humanitaria de la historia reciente de Palestina, Sudáfrica presentó el pasado 29 de diciembre una demanda contra el régimen israelí ante la CIJ por “actos de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza” durante la guerra en curso.
La CIJ, a su vez, fijo fechas de la primera audiencia contra Israel para este jueves 11 y viernes 12 de enero, esto pese al rechazo de Israel y su principal aliado, Estados Unidos, que ha bloqueado todos los esfuerzos internacionales para declarar un alto el fuego en el enclave costero.
Muchos países, entre ellos Irán, Venezuela, Nicaragua, Bolivia y Turquía, han apoyado la demanda presentada por Sudáfrica contra Israel, mientras que más de 1000 movimientos populares, partidos políticos, sindicatos y otras organizaciones de derechos humanos internacionales han pedido a los Estados seguir el paso valiente dado por Pretoria.
El ejército israelí bombardea sitios civiles como hospitales, viviendas, centros de refugiados de las Naciones Unidas, escuelas, templos, iglesias y mezquitas, y las rutas de evacuación. El régimen sionista también ha matado a más de 23 000 personas, en su mayoría mujeres y niños, al tiempo que usa el hambre como un arma para exterminar a la nación palestina.
A estos delitos graves se suman además las retóricas inflamatorias de los líderes israelíes que han hecho declaraciones abiertamente genocidas, mostrando sus intenciones de desalojar permanentemente al pueblo palestino de sus tierras ancestrales.
