Irán pidió ayuda a Estados Unidos para la búsqueda del siniestrado helicóptero que transportaba al presidente iraní, Ebrahim Raisi, pero Washington no pudo proporcionarla a tiempo, afirmó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
“El Gobierno iraní nos pidió ayuda. Dejamos claro que les ofreceríamos toda la colaboración posible, como haríamos en respuesta a cualquier petición de un gobierno extranjero en este tipo de situación. Al final no pudimos prestar esa ayuda“, declaró el vocero en rueda de prensa este lunes.
Miller no quiso proporcionar más detalles, limitándose a decir que la asistencia estadounidense fue imposible “en gran parte por razones logísticas“.
De otra parte, comentó acusaciones formuladas por el excanciller iraní Mohammad Javad Zarif, quien este lunes responsabilizó a las sanciones estadounidenses, impuestas al país desde hace décadas, por la falta de acceso a nuevas aeronaves y a piezas de recambio para un parque ya anticuado.
“A fin de cuentas es el Gobierno iraní, y no otro actor, el responsable de la decisión de hacer volar un helicóptero de 45 años en lo que se describió como malas condiciones meteorológicas”, alegó.
El presidente de Irán falleció este domingo al accidentarse el helicóptero en el que viajaba con otros funcionarios cerca de la frontera con Azerbaiyán. La aeronave en la que iba tuvo que realizar un aterrizaje forzoso debido a la densa niebla.
Los medios estatales iraníes responsabilizaron del hecho al mal funcionamiento técnico del helicóptero, un Bell 212 de fabricación estadounidense, en el que viajaba el presidente.
También perdieron la vida el ayatolá Al Hashem; el ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian; el gobernador de la provincia iraní de Azerbaiyán Oriental, Malek Rahmati; dos agentes del cuerpo de protección del presidente, un piloto, un copiloto y un oficial técnico.
